El gobernador electo descartó que el ataque haya estado dirigido contra él y que se haya refugiado en la base naval, como trascendió. El empleado hotelero José Luis Mojica Zavaleta, el nombre de la víctima incidental, informa la Fiscalía.
Una balacera se desató anoche en la avenida Costera de Acapulco, afuera del restaurante Forza Italia ubicado frente al hotel Calinda, donde el gobernador electo Héctor Astudillo Flores cenaba con su esposa Mercedes Calvo.
Las autoridades informaron que el ataque fue al aledaño bar Reynas.
Los disparos impactaron en la humanidad de José Luis Mojica Zavaleta, un empleado hotelero que caminaba por el lugar del atentado y que le ocasionaron la muerte, hecho que ya investiga la Fiscalía General del Estado.
El ataque fue contra las fachadas de los bares Reynas, Kántala y VIP, los tres ubicados a un costado del restaurante Forza Italia.
En el ataque, dos de los guardaespaldas del gobernador resultaron heridos y fueron llevados al hospital naval para ser atendidos.
En una breve llamada a El Sur, Astudillo Flores dijo que no fue un atentado en su contra y confirmó que dos de sus guardaespaldas resultaron “con heridas leves” durante el ataque al bar que está a un lado del lugar donde él estaba cenando.
Explicó que sus guardaespaldas no repelieron la agresión.
Lo que se conoció anoche es que afuera del restaurante Forza Italia, lugar donde estaba cenando el gobernador electo Héctor Astudillo, ocurrió una balacera y al escucharse las detonaciones los guardaespaldas del gobernador lo sacaron de inmediato del lugar y lo llevaron a las instalaciones de la Octava Zona Naval.
Otra versión que se conoció es que Héctor Astudillo iba en su camioneta y fue a su vehículo al que hombres armados desde otro automóvil le dispararon, y después del ataque se refugió en las instalaciones de la Octava Zona Naval, versión que el gobernador electo negó.
También se dijo que los guardaespaldas del gobernador electo hicieron disparos y dos resultaron heridos.
El ataque a los bares generó una intensa movilización policiaca y al lugar llegaron más de veinte patrullas de diferentes corporaciones, entre Policía Federal, del estado y municipal, así como efectivos del Ejército, porque la información que se dio al principio es que había sido atacado el restaurante donde cenaba e gobernador electo.
Al lugar llegó el coordinador estatal de la Policía Federal, Rafael Lomelí, el fiscal regional David García Muñoz, y el titular del Ministerio Publico de Costa Azul.
En el ataque los vehículos afectados fueron tres, uno de ellos un Corvette rojo con placas de circulación HCN-68-32, que tenía disparos en la ventana del lado del chofer; otro fue un Versa blanco con placas del estado de México, que recibió disparos en la ventana de la parte de atrás del conductor, y un Peugeot rojo con placas HBG1713, el cual tenía disparos en la ventanilla del conductor, y al lado del que, en la banqueta, quedó el cuerpo de la única víctima.
Los agentes policiales acordonaron la zona para revisar los tres vehículos que resultaron con daños en el ataque.
La balacera también causó pánico entre los visitantes a los bares que se ubican en la transitada avenida Costera, quienes fueron sacados y colocados afuera de una tienda Oxxo.
En el bar presuntamente atacado de nombre Reynas hay cámaras de seguridad afuera y a un costado se encuentra el bar Kántala, otro bar llamado VIP y a un costado el restaurante Forza Italia.
En las fachadas de los bares se observaron al menos unos seis disparos, y según versiones policiacas hombres armados a bordo de otro vehículo dispararon contra el bar Reynas y ahí resultó muerto un hombre de unos sesenta años, el cual quedó tendido boca abajo frente a la entrada del bar.
Policías ministeriales no permitieron la toma de fotografías y obstruyeron la realización del trabajo de los reporteros ante la presencia del fiscal regional.
El cuerpo fue levantado y trasladado al Servicio Médico Forense para los trámites legales correspondientes.
Según las autoridades la víctima murió por un infarto producido por la balacera. Hasta las 12 la noche se continuaba realizando el peritaje.
Tras el ataque fuerzas federales y estatales desplegaron un plan de recorridos de vigilancia por toda la ciudad.
No fue un ataque en mi contra, dice el gobernador electo.
En una llamada a El Sur después de media noche, Héctor Astudillo dijo que no fue un ataque en su contra, que estaba bien y lamentó lo sucedido.
Confirmó que dos de sus guardaespaldas resultados heridos pero dijo que ellos no hicieron disparos.
Dos horas después de los hechos el gobernador electo confirmó que estaba en el restaurante Forza Italia, cercano al lugar donde ocurrió la balacera, mediante mensajes difundidos en las cuentas de Facebook y Twitter.
“Lamentable lo que sucede en Acapulco, trabajaremos para disminuir los índices de violencia en Guerrero. Hoy me tocó estar cenando en una pizzería cerca de donde se realizaron hechos de violencia. Me encuentro bien”, escribió en Facebook a las 11:47 de la noche.
En Twitter el mensaje que difundió fue similar, “lamentable lo que sucede en Acapulco; hubo un incidente en un lugar cercano en donde estábamos cenando. Nos encontramos bien” escribió a las 11:34 de la noche.
En los mensajes que difundió por redes sociales el gobernador electo descartó que el ataque haya sido contra él y que se hubiera refugiado en las instalaciones base naval.
Astudillo Flores estuvo ayer en Tierra Caliente y Zihuatanejo, donde se reunió con alcaldes a quienes les pidió poner atención en el área de seguridad pública; y se supo que por la noche regresaría a Acapulco.
Por su parte el alcalde Evodio Velázquez escribió en su cuenta de Twitter que “me comuniqué con @Hector Astudillo, se encuentra bien. Lamento los hechos, redoblaremos esfuerzos para trabajar unidos contra la inseguridad”.
El restaurante Forza Italia se ubica frente al hotel Calinda, en la Costera, en la zona Dorada del puerto, que ayer registró una ocupación del 57 por ciento.
El 10 de noviembre de 2013, dentro del restaurante Forza Italia un hombre fue asesinado, y días después fue identificado como Moreno Gallo, quien había sido jefe de la mafia italiana con sede en Montreal, Canadá.
FUENTE: EL SUR.
AUTOR: CARLOS ROMERO.