Namiko Matzumoto, franco alfil del gobernador priista Javier Duarte para encabezar un nuevo organismo autónomo, carga con la pesada loza de que, desde que tomó las riendas de la CEAPP, han asesinado en la entidad a 14 periodistas, hay cuatro comunicadores desaparecidos, más de una veintena de reporteros golpeados –en su mayoría por policías de la SSP– y una decena en el “exilio” (Proceso 2043).
En la terna para que el pleno del Congreso elija al próximo ombudsman local se encuentran los académicos Rafael Ortiz Castañeda, Enrique Córdoba y la propia Matzumuto.
Legisladores del PRI confiaron a este reportero que “la cargada” para presidir la CEDH es hacia la actual “defensora” de comunicadores en la entidad.
El padrinazgo de la Secretaría Ejecutiva de la CEAPP, Namiko Matzumoto, y de la presidenta del mismo organismo, Benita González, es atribuido a la actual empresaria periodística Georgina Domínguez Colio, quien fue la primera vocera que tuvo Duarte de Ochoa.
En notas informativas y en redes sociales, reporteros de la zona centro y sur de Veracruz han mostrado su repudio e inconformidad porque se “premie” a Namiko Matzumoto con la responsabilidad de un organismo autónomo de mayor envergadura, siendo que como “defensora” de periodistas poco hizo por proteger al gremio.
Mussio Cárdenas, columnista de “Informe Rojo” en el sur de Veracruz y excorresponsal de medios nacionales, elaboró un artículo titulado “Namiko, la tóxica protectora de periodistas”.
En ese texto, Cárdenas fustiga:
“Tapadera y cómplice, Namiko Matzumoto sólo defiende a Javier Duarte. A la prensa, no. No es crítica ni alza la voz, no condena el clima de hostilidad ni se inmuta cuando el gobernador amenaza y tilda a los periodistas de ‘manzanas podridas’, ni refuta el “pórtense bien”. Ser-vil (sic) como nadie más, apaga cualquier fuego que se enciende en cada afrenta al gremio reporteril, en cada amenazado, en cada agredido, en cada asesinado, imperturbable en el Veracruz de los 14 periodistas ultimados por ejercer su oficio, en el Veracruz convertido en el lugar más inhóspito para la labor periodística. Lo suyo es proteger al gobernador”.
A través de la agencia Quadratín –cuya licencia en Veracruz pertenece a Georgina Domínguez–, Matzumuto intentó hacer contrapeso a los “ataques” del gremio periodístico, pues en una entrevista en su oficina, la aspirante a la CEDH atajó:
“No le temo al fuego amigo ni a las críticas de algunas voces; mi trayectoria académica de más de 15 años en materia de derechos humanos son mi mejor carta de presentación”, justificó.
En Proceso 2025, el perfil de Matzumoto fue retratado así: “Exempleada del Poder Judicial estatal, llegó a la CEAPP por ‘efecto rebote’. Su intención era encabezar la CEDH y, aunque fue incluida en la terna propuesta al Legislativo, fue desechada por un compromiso político de Duarte con el actual ómbudsman local Fernando Perera, padre de la entonces diputada local priista Angela Perera.
Matzumoto fue propuesta meses después como secretaria ejecutiva de la CEAPP, luego de trabajar en el equipo de prensa del Consejo de la Judicatura, donde –recuerdan reporteros de la fuente– era la encargada de organizar el servicio de café, refrescos y galletas antes de cada conferencia de prensa del titular del Tribunal Superior de Justicia.
Esta tarde, Namiko Matzumuto acudió a entrevista con legisladores locales para su “evaluación”; de ser ungida, será el próximo miércoles 13 cuando rinda protesta.
FUENTE: PROCESO.
AUTOR: NOÉ ZAVALETA.
LINK: http://www.proceso.com.mx/?p=425525