El Presidente Enrique Peña Nieto y funcionarios del Gobierno federal como el Secretario de Energía, Pedro Joaquín Coldwell, y el titular de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), Enrique Ochoa Reza, han reiterado en varias ocasiones, desde la aprobación de la Reforma Energética en agosto de 2013, que una de las principales bondades de la legislación es apoyar a la economía de los mexicanos con la reducción en los precios de la luz, sin embargo, a casi dos años de su implementación las tarifas eléctricas en el sector industrial en México son 44 por ciento mayores que en Estados Unidos y anoche el Gobierno federal anunció un nuevo incremento que afectará al consumo doméstico.
El 12 de agosto de 2013, en un mensaje a la nación con motivo de la Presentación de la Reforma Energética, anunció:
“Me dirijo a ustedes con la convicción de que el Gobierno de la República hoy a tomado una decisión trascendental para el desarrollo de nuestro país.
“Este día envié al Senado de la República la iniciativa de la Reforma Energética. Esta reforma representa una de las grandes oportunidades para México en los últimos años.
“Si aprovechamos esta gran oportunidad se crearán cientos de miles de nuevos empleos y con mejores salarios. Si llevamos a cabo esta reforma bajará el precio de la luz y el gas, igualmente bajará el precio de los fertilizantes y en consecuencia nuestro campo producirá más”.
Un año después, en la promulgación de la Reforma Energética, el 8 de agosto de 2014, el Presidente Enrique Peña Nieto se comprometió a bajar las tarifas eléctricas de consumo y doméstico e industrial. Señaló que en el país el costo de la electricidad es elevado y por ello no resultaba competitivo a los sectores productivos.
“Otro aspecto de la Reforma Energética es que apoyará la economía de las familias mexicanas a reducir el costo de la luz y el gas, esto significa que tendrá beneficios directos en los hogares del país.
“¿Cómo se logrará esto? con más inversión, se podrá extraer más gas y éste será más barato para los mexicanos. A la vez se podrá utilizar ese gas para generar electricidad a un costo menor, haciendo con ello que baje el recibo de la luz”, dijo el Presidente en su discurso.
En el minuto 6:50 el Presidente habla de la reducción a las tarifas eléctricas y el gas.
En cuanto a la generación de energía eléctrica para la industria, dijo que el contar con precios del gas natural más económicos debido a una mayor producción de este hidrocarburo como consecuencia de la apertura de ese sector, permitiría que los costos de la generación de electricidad a través de las plantas de ciclo combinado
(que generan cerca del 60 por ciento de la electricidad en México) caigan en el futuro hasta equiparase con los precios en Estados Unidos.
En su discurso durante la promulgación de las Leyes Secundarias de la Reforma Energética, el 11 de agosto de 2014, refrendó el compromiso de bajar los costos de la luz.
“Lo más importante es que esta transformación [Reforma Energética] se traducirá en beneficios concretos para todas las familias. Al haber más gas y a menor costo para generar electricidad, así como una mayor competencia en el sector eléctrico, gradualmente disminuirán los precios de la luz y gas que pagan los hogares del país.
“De manera similar los negocios también pagarán menos por la energía, especialmente las micro, pequeñas y medianas empresas. Con el tiempo disminuirán sus costos de producción y con ello crecer y generar empleos”, explicó el Ejecutivo federal en el minuto 57:19 de su discurso.
Pero bajar los precios de la luz, es una promesa que Peña Nieto viene arrastrando desde su campaña presidencial.
“A las familias mexicanas les llega un recibo un recibo de luz que se ha venido encareciendo en los últimos años. Con la Reforma Energética voy a bajar el costo de la luz eléctrica, les va allegar el recibo de la luz por menos, y ese es un compromiso que he hecho con todos los mexicanos.
“Se trata de que cada familia mexicana sienta los beneficios de un buen gobierno día a día”, expresó Peña Nieto cuando era candidato presidencial durante un spot en junio de 2012.
Sin embargo, el Presidente ha quedado a deber a los mexicanos porque a casi un mes de la puesta en marcha de la Reforma Energética sus bondades no se han visto reflejadas en los bolsillos de los mexicanos, pues la luz, el gas y la gasolina, siguen presentando incrementos.
Las bondades de la Reforma Energética también han sido replicadas por sus funcionarios. El 31 de julio de 2013, el Secretario de Energía, Pedro Joaquín Coldwell dijo:
“Queremos una Reforma Energética para que la economía crezca a su verdadero potencial y genere más empleos de calidad, para producir suficiente gas natural a buen precio que beneficie la producción industrial.
“Para explotar los beneficios en aguas profundas y otros no convencionales que requieren cuantiosas inversiones y tecnología de punta, para democratizar la productividad dando acceso a electricidad mas barata a las pequeñas y medianas empresas, así como a la industria en general”.
El pasado 30 de junio, Coldwell anunció que en abril próximo se licitará la primera línea de transmisión eléctrica que se financiará con recursos privados y aseguró que la competencia en el sector consolidará la disminución de las tarifas eléctricas.
El titular de la Secretaría de Energía recordó que una de las principales razones que motivaron al presidente Enrique Peña Nieto a emprender la Reforma Energética fue que las tarifas eléctricas ya eran en promedio 75 por ciento más caras que en la frontera con Estados Unidos.
Indicó que a dos años de la Reforma Energética ya hay resultados muy importantes en materia de baja de tarifas eléctricas, pues en los últimos 12 meses la industrial, dependiendo las regiones del país, ha bajado de 25 a 35 por ciento y de nueve a 22 por ciento la comercial.
Mientras que la doméstica de alto consumo bajó 9.4 por ciento y dos por ciento la residencial, que es la subsidiada, y no se incrementó por segundo año consecutivo el cuatro por ciento anual que se acostumbraba como alza de las tarifas eléctricas.
Pero anoche, la CFE informó de un aumento del 2 al 5 por ciento en las tarifas eléctricas para el mes de julio, el cual afectará a los sectores industrial, comercial y domestico de alto consumo.
La CFE justificó e incremento debido al aumento en los precios del combustible que se utilizan para generar energía eléctrica.
“Los combustibles y gas natural tuvieron una alza en sus precios de un 8.4 y 18 por ciento respectivamente, lo cual resulta imposible mantener las tarifas bajas que prometió la Reforma energética”, precisó en un comunicado.
Indicó que después de cumplirse 18 meses consecutivos de reducciones a las tarifas eléctricas para el sector industrial en su comparación interanual, éstas aumentan para el mes de julio de 2016 respecto a julio de 2015.
Las tarifas eléctricas para este sector tendrán un incremento entre el 2 y 5 por ciento, en el comercial será entre el 5 y 7 por ciento, mientras que para el doméstico de alto consumo las tarifas registraron un incremento del 6.8 por ciento, respecto al mismo mes del año pasado.
La CFE destacó que en el sector doméstico de bajo consumo, cuya tarifa subía 4 por ciento cada año desde 2006 y hasta 2014, no habrá un aumento y añadió que el 98 por ciento de los consumidores domésticos a nivel nacional se encuentran en este sector, por lo que no se verán afectados.
El aumento a las tarifas eléctricas se suma al del precio de las gasolinas registrado a partir del viernes pasado. La Magna subió 24 centavos para ubicarse en 13.40 pesos por litro; mientras que la Premium subió por segundo mes consecutivo, ya que en junio su precio se ubicó en 14.03 pesos por litro; mientras que en julio subió 34 centavos más por lo que está a la venta en 14.37 pesos.
En octubre del año pasado, el Secretario de Hacienda, Luis Videgaray Caso informó que a partir de enero de 2016, como parte de las medidas fiscales propuestas en el paquete económico, los mexicanos se encontrarían con una disminución en los precios de las gasolinas.
En México el precio de la luz es 44 por ciento más costosa que en Texas, Estados Unidos, de acuerdo con datos del Departamento de Energía de Estados Unidos.
El promedio del kilowatt-hora (kwh) consumido en Texas durante septiembre de 2015 por la industria fue de 0.0544 dólares, es decir, unos 0.9148 pesos al tipo de cambio observado el año pasado.
En México, el precio medio de la energía al sector industrial en septiembre del año pasado fue de 1.3198 pesos por kwh consumido, un 44 por ciento mayor que en Texas.
De acuerdo con el titular de la CFE, Enrique Ochoa Reza, en México las tarifas eléctricas son más caras que en Estados Unidos.
“México paga tarifas eléctricas altísimas, todos lo sentimos en nuestro bolsillo, en la casa, en el negocio, en la empresa, y en la industria, pagamos 25 por ciento más en promedio que en los Estados Unidos; pero si desglosamos esas cifras a lo largo de la cadena productiva nacional vemos que los números son todavía más dramáticos”, dijo el funcionario al participar en la convención de industriales de la transformación de Canacintra en febrero de 2014, después de la aprobación de la Reforma Energética.
El directivo reveló que el sector industrial en México paga 69 por ciento más de energía eléctrica que en Estados Unidos, los comercios 135 por ciento más que en la Unión Americana y las residencias de alto consumo eléctrico pagan 149 por ciento más que en el vecino país.
Desde la aprobación de la Reforma Energética, analistas cuestionaron la previsión de que los precios de la electricidad bajarán con la reforma.
Un estudio la consultora internacional energética Wood Mackenzie, detalló que los bajos costos de la generación eléctrica se reducirían sólo si se aumenta significativamente la producción de gas natural (insumo indispensable para generar luz) y si se desarrollaba la infraestructura de transporte del energético.
“Los efectos sobre los precios siguen siendo inciertos, pues la propuesta del Gobierno no contempla la reducción de subsidios para productos refinados o electricidad”, indicó la consultora.
Las pérdidas no técnicas como el robo de electricidad o la falta de pago, son otros de los factores que pueden detener la obtención de costos más bajos en las tarifas eléctricas, porque éstos inciden en las finanzas de la CFE y ésta los termina transfiriendo a los usuarios finales, de acuerdo con analistas.
El robo de las líneas eléctricas ascienden a más del 20 por ciento de la energía que se genera en México.
La CFE estima que en los próximos 12 años habrá 56 millones de familias usuarias del servicio eléctrico, lo que hará necesario incrementar la capacidad de generación en 72 por ciento.
Actualmente la empresa del Estado genera aproximadamente 40 por ciento de la demanda de luz en el país y el restante lo compra a los generadores independientes de energía y a pequeños productores, de acuerdo con datos de la CFE.
FUENTE: SIN EMBARGO.
AUTOR: REDACCIÓN.
LINK: http://www.sinembargo.mx/04-07-2016/3062291