Un alto ejecutivo de Odebrecht denunció que en noviembre de 2014 recibió la petición de pagar ilegalmente cinco millones de dólares al entonces director de Petróleos Mexicanos, Emilio Lozoya Austin, como contraprestación por beneficios indebidos otorgados a la constructora brasileña.
La acusación fue revelada por el Supremo Tribunal Federal de Brasil, aunque en el documento judicial no se aclara si el pago ilegal lo solicitó el propio Lozoya o algún otro funcionario de Pemex, y tampoco precisa si finalmente se concretó el soborno.