Durante la administración del exgobernador Javier Duarte su esposa, Karime Macías, construyó una red de vínculos que le permitió a ella y a sus familiares tener acceso a recursos públicos.
Algunos ocuparon cargos en la administración estatal, incluida la Secretaría de Finanzas. Otros, según denuncias que han dado paso a averiguaciones y carpetas de investigación, fungieron como presuntos prestanombres para invertir dineroproveniente del erario en joyas, propiedades y demás lujos.