Alrededor de 800 familias indígenas nahuas huyeron de la inseguridad y la violencia que azota a las comunidades de Chilapa de Álvarez en la Montaña Baja de Guerrero, informó el Centro Regional de Derechos Humanos José Ma. Morelos y Pavón.
Entre los desplazados hay indígenas de Tepozcuahutla y Ahuihuiyuco, así como de Lodo Grande, y Tepehuizco, del municipio de Chilapa de Tetilán. “También las hay de Tlaltempanapa, del vecino municipio de Zitlala. Son en realidad más de 800 familias desplazadas en esa región”, señaló el Centro.