En México existen 35 mil 433 víctimas directas de desplazamiento forzoso, de las que 30 mil 379 fueron reportadas a la Comisión Nacional de Derechos Humanos por autoridades estatales y municipales, de acuerdo con la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción por los Derechos Humanos (CMPDH).
Dicha instancia define lo que se vive en Guerrero como una “crisis humanitaria” que ha provocado más de 2 mil desplazamientos a partir de 2006, justo cuando el entonces presidente, Felipe Calderón Hinojosa, declaró la guerra contra los cárteles de la droga afectando a miles de mexicanos.