Un ejército anónimo conformado por hombres y mujeres jóvenes de la Ciudad de México ha invadido las calles de las zonas afectadas por el sismo del pasado 19 de septiembre. Están en todas partes y, aunque una tragedia nunca trae algo bueno, han sido notables la solidaridad, el valor, la nobleza, la organización y la entrega de la juventud mexicana.
Desde la cuenta de Facebook de la joven Al Barreiro se ha hecho viral su testimonio en las arduas jornadas de trabajo para sacar el escombro de un edificio derrumbado.
Aquí su narración: