Pese a los recortes en el presupuesto, el gobierno ha gastado cada vez más en lo que va de la actual administración, pero estos recursos no han tenido un impacto sobre el crecimiento económico.
En el primer año del actual sexenio el gasto neto como proporción del Producto Interno Bruto (PIB) se ubicó en 25.9 por ciento y en 2016 se elevó a 27.4 por ciento, la cifra más elevada desde 1990.