En México el lavado de dinero no es investigado ni perseguido penalmente de manera proactiva y sistemática sino de forma reactiva y el país debe intensificar sus esfuerzos para perseguir a los blanqueadores de capitales y confiscar sus activos, dijo el miércoles un reporte de un ente intergubernamental.
El Grupo de Acción Financiera (GAFI), creado para establecer los estándares de lucha contra el financiamiento ilícito, dijo que si bien el país latinoamericano tiene un marco legal e institucional bien desarrollado para enfrentar el lavado de dinero su persecución es deficiente.