En 2016, las irregularidades encontradas por la Auditoría Superior de la Federación (ASF) sumaron un total de 104 mil 241 millones de pesos, de los que sólo logró recuperar 7 mil 896 millones.
En todo ese cúmulo de revisiones, Presidencia y cinco dependencias federales pasaron por la lupa del órgano fiscalizador que detectó miles de millones en gastos no comprobados y hasta pagos por proyectos de los que simplemente se hizo copy paste.