Desde enero pasado los mil 500 asesores educativos de los Centros de Atención para Estudiantes con Discapacidad (CAED), de todo el país, no reciben su sueldo.
Sus exigencias a la Secretaría de Educación Pública (SEP) van más allá del pago de su salario, pues además acusan una serie de irregularidades respecto a sus condiciones laborales y entorno de trabajo.