La Auditoría Superior de la Federación (ASF) realizó en esta segunda entrega de la cuenta pública de 2018 varias revisiones a la gestión financiera de distintas dependencias y órganos autónomos, que arrojaron problemas con contratos no cumplidos o pagos de personal injustificado.
Por ejemplo, la Secretaría de Bienestar (antes de Desarrollo Social) tiene 211 millones 705 mil pesos por aclarar, que generaron siete promociones de responsabilidad administrativa sancionatoria por parte de la ASF, además de pedir al Órgano Interno de Control una investigación por dos irregularidades.