Dos funcionarios del gobierno de Baja California encabezado por Jaime Bonilla estarían involucrados en una red de corrupción mediante la cual presuntamente cobraban cuotas millonarias a empresarios, a cambio de contratos.
Los funcionarios presuntamente involucrados son la exsecretaria de Bienestar Social del Estado, Cinthya Gissel García Soberanes y el exsubsecretario de esa dependencia, Rosendo Colorado.