José Antonio Meade Kuribreña no es investigado ni tiene imputaciones legales por corrupción ligadas a la llamada Estafa Maestra, hasta ahora. Sin embargo, esa situación podría cambiar ahora que Rosario Robles Berlanga pidió a la Fiscalía General de la República ser testigo colaborador del caso, pues ya antes los abogados de la exsecretaria de Sedesol mencionaron a Meade Kuribreña como un supuesto participante. Donde sí tiene señalamientos claros es en las secretarías de Estado a su cargo en el sexenio de Enrique Peña Nieto pues, de acuerdo con datos de la Auditoría Superior de la Federación, heredó irregularidades no solventadas por casi 3 mil millones de pesos entre 2013 y 2017.
José Antonio Meade Kuribreña y Rosario Robles Berlanga estrecharon manos el 27 de agosto de 2015. Ese día, Meade Kuribreña recibió la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) y Robles Berlanga la de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu). Dos dependencias a través de las cuales hubo millonarios desvíos de recursos para favorecer campañas políticas del Partido Revolucionario Institucional (PRI), entre ellas la carrera presidencial de Meade en 2018.
La triangulación de recursos de programas sociales –sobre todo de Sedesol y Sedatu– ocurrió durante casi todo el sexenio pasado y abarcó esquemas de defraudación como la llamada “Estafa Maestra”, que entre 2013 y 2014 causó daños al erario público por al menos 7 mil 670 millones de pesos.