El Impacto Ambiental de la Fase 1 del megaproyecto del Tren Maya, que incluye la tala de 800.95 hectáreas de selva para el recorrido desde Palenque, Chiapas, a Izamal, Yucatán, ya fue aprobado por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
A pesar de la “afectación de masa forestal que contribuirá a la emisión de carbono, considerado uno de los causantes del cambio climático”, la Semarnat aprobó el Impacto Ambiental del Tren Maya porque consideró que “el desarrollo del proyecto no compromete la integridad funcional de los ecosistemas presentes en el Sistema Ambiental Regional, ni generará impactos ambientales relevantes”.