Los demócratas en el Congreso de Estados Unidos acusaron al presidente Donald Trump de incitar a la insurrección y evaluaban someterlo a juicio político por segunda vez después de que sus partidarios, alentados por sus falsas afirmaciones de fraude electoral, irrumpieron en el Capitolio esta semana.
En medio de los crecientes pedidos de destitución, Trump finalmente denunció la violencia que dejó cinco muertos, incluido un oficial de policía. En un video publicado el jueves por la noche, el presidente republicano pidió la reconciliación y prometió una transición de poder sin problemas y ordenada.