Durante la pandemia por COVID-19, mujeres con familiares desaparecidos enfrentan dificultades para solventar los gastos de las búsqueda, ya que perdieron sus fuentes de ingresos y los apoyos económicos que obtenían de instituciones gubernamentales, como las comisiones de atención a víctimas.
Éste fue uno de los hallazgos del “Diagnóstico de afectaciones a partir del COVID-19”, que elaboró en diciembre de 2020 el Instituto Mexicano de Derechos Humanos y Democracia, A. C. (IMDHD), tras consultar a voceras de 13 colectivos de familiares de personas desaparecidas en Estado de México, Oaxaca, Puebla y Veracruz.