“El motivo de él para viajar fue que era de escasos recursos. Querían cruzar a los Estados Unidos, pero lastimosamente no logró su destino”. Así explicaba Evaristo Agustín, cuñado de Marvin Alberto Tomás, de 22 años, la decisión del joven de dejar el caserío Las Flores, en Comitancillo, departamento de San Marcos, Guatemala. Fue hace dos semanas cuando Tomás, que con el Juventud Comiteca llegó a jugar en la tercera división de fútbol del país centroamericano, anunció a sus familiares más cercanos que trataría de alcanzar Estados Unidos. Vivía con su madre, Ángela Tomás, y no tenía pareja ni hijos, por lo que se propuso migrar animado por unos primos que residen en Estados Unidos.
Durante todo el trayecto Tomás se mantuvo en comunicación con sus familiares a través de mensajes de WhatsApp. Hasta un día antes del hallazgo de los cuerpos, cuando no volvió a conectarse.