La participación de policías estatales en el asesinato y calcinación de 19 migrantes en el municipio de Carmargo, Tamaulipas, “no es un hecho aislado, sino consecuencia de una serie de abusos de autoridad”, aseguró Raymundo Ramos, presidente del Comité de Derechos Humanos de Nuevo Laredo.
De acuerdo con Ramos, los abusos de autoridad han caracterizado la administración del gobernador Francisco García Cabeza de Vaca, y agregó que la aprehensión de 12 agentes estatales implicados en el caso de los 19 migrantes centroamericanos incinerados sólo busca quitar presión a las autoridades tamaulipecas, así como que las detenciones “son insuficientes” para hacer justicia en el caso.