De acuerdo con el diario español 'El País', la Banca Privada d'Andorra (BPA) tenía en 2012 a 174 "misteriosos clientes mexicanos con 243 millones"; cuando fue intervenida por lavado de dinero en 2015, las autoridades de ese país investigaban 80 cuentas mexicanas.
La Banca Privada d’ Andorra (BPA) había decidido en febrero de 2012 “poner fin a la presencia en México” de la institución, según un acta de su comité de control dada a conocer por el periódico español El País.
De acuerdo con el diario, en la sesión del 27 de febrero de 2012, los propietarios del banco, Ramón e Higini Cierco, habían tomado esta determinación por las crecientes sospechas sobre las fortunas albergadas en éste. En 2012 la BPA tenía 174 “misteriosos clientes mexicanos con 243 millones”; cuando fue intervenida por lavado de dinero en 2015, las autoridades andorranas investigaban 80 cuentas mexicanas.