Más de 500 operaciones globales de la trasnacional Odebrecht y de Emilio Ricardo Lozoya Austin en 29 países –incluidos paraísos fiscales– se documentan en el expediente que integró la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) sobre uno de los casos de corrupción más relevantes a nivel internacional, y cuya trama involucra a los sexenios del panista Felipe Calderón Hinojosa y el priista Enrique Peña Nieto.
La ruta del dinero que trazó la autoridad mexicana para denunciar presuntos delitos en contra de la hacienda pública encuentra siete grandes conexiones con el exdirector general de Petróleos Mexicanos (Pemex) y ahora testigo colaborador de la Fiscalía General de la República. Se trata de los sobornos –por 10.5 millones de dólares– que habría recibido para beneficiar ilegalmente los negocios de la empresa brasileña en el país.