En 2006 el líder minero Napoleón Gómez Urrutia acusó persecución política luego de no repartir entre los trabajadores los más de 54 millones de dólares del fideicomiso por la venta de Cananea (hoy Grupo México), y huyó a Canadá. Este abril, la Junta de Conciliación de la Secretaría del Trabajo resolvió en un laudo que el sindicato que el Senador de Morena dirige debe dar ese dinero.
Como acto de “venganza” y “corrupción” calificó el Sindicato Nacional de Trabajadores Mineros (SNTMMSRM) al megalaudo emitido por la Junta de Conciliación y Arbitraje de la Secretaría de Trabajo que le pide pagar 54 millones de dólares a mineros por la venta de Cananea, 15 años después del exilio del dirigente sindical Napoleón Gómez Urrutia. La resolución absolvió además a las empresas relacionadas, Grupo México y Grupo Financiero Scotia Bank Inverlat, de cubrir este monto.
La Unión Nacional de Sindicatos Mineros (UNASIM) tuiteó que la Junta de Conciliación actuó conforme a derecho a favor de la justicia laboral. Por su parte, el Sindicato Nacional de Mineros respondió que el laudo carece de validez jurídica y no es condenatorio, sino “una mera propuesta de cumplimiento” por lo que el Poder Judicial Federal determinará su legalidad.