Son los hechos los que hoy hablan, y que le dan la razón a quienes, en 2006, advirtieron que Andrés Manuel López Obrador “es un peligro para México”.
Algunos calificaron aquella frase como “campaña negra”. No fue así. Al paso del tiempo, fue profecía cumplida. Quince años después comprobamos que fue, tan sólo, un adelanto de lo que vendría con el eventual triunfo de AMLO para la Presidencia. Si acaso, se acuñó el “es un peligro para México” entre el fuego cruzado del virulento y crispado clima electoral de 2006, pero que nadie se victimice: el lodo provino de todos lados y nadie se quedó con la boca callada.