Alrededor de 30 comunidades indígenas y colectivos denunciaron que el actual gobierno de la Cuarta Transformación pretende transformar la región del Istmo de Tehuantepec en un inmenso corredor de manufactura, ensamblaje y transporte de mercancías en manos del capital estadunidense e internacional y que al mismo tiempo funcionará como un muro de contención de los procesos migratorios desde Centroamérica.
Por tal razón acordaron rechazar el corredor interoceánico y todos los megaproyectos impulsados por el capital internacional y el gobierno de la 4T: “no negociamos, ni nos rendimos”, sentenciaron.