Entre 2006 y 2020, cada año fueron asesinados en promedio 21 efectivos del Ejército Mexicano que realizaban operativos en contra del crimen organizado. Sin embargo, las cifras del Gobierno federal indican que por cada castrense caído hubo 16 agresores abatidos.
Los operativos en contra del crimen organizado costaron la vida de al menos 581 militares entre 2006 —cuando el Gobierno del expresidente Felipe Calderón Hinojosa dio inicio a la llamada “guerra contra el narcotráfico”— y junio de este año, de acuerdo con cifras de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).