Alfredo Martínez Sánchez, de 34 años, desapareció en Nuevo Laredo, Tamaulipas, la noche del 17 de enero de 2020. Trabajaba como operador de tráiler en la empresa Transportes Brenda, había entregado la caja con la carga y al día siguiente debía dirigirse a Monterrey, Nuevo León. A las 8 llamó a su esposa, Greta Martínez, y habló con ella durante 20 minutos.
Habitualmente, cuando viajaba a la ciudad fronteriza acudía a un bazar de productos de segunda mano llegados desde Estados Unidos. Así que le dijo que iba a sacar dinero y le mandaba fotos de la ropa que encontrase para que ella eligiese la que más le gustaba. Nunca llegaron aquellas imágenes.