El Colectivo de Observación y Monitoreo de Derechos Humanos en el Sureste Mexicano denunció este jueves el uso excesivo de la fuerza pública por parte de integrantes de la Guardia Nacional (GN) y agentes del Instituto Nacional de Migración (INM) para desmantelar la tercera caravana de migrantes que se había formado en menos de una semana.
En este incidente violento fueron agredidos –y se les impidió realizar su labor– los activistas de organizaciones civiles que conforman este Colectivo y los periodistas que pretendieron documentar este operativo policiaco en contra de personas migrantes y solicitantes de refugio.