La regulación que la CRE impuso a los precios del gas doméstico LP arrancaron desde el 1 de agosto de este 2021, mientras que la distribuidora paraestatal del insumo, Gas Bienestar, comenzó a operar en la Alcaldía Iztapalapa 30 días después.
Las empresas privadas parecían hace apenas unos meses estar jugando “a las vencidas” con el Gobierno de México. Y desde hace semanas, cuando el Presidente Andrés Manuel López Obrador las amenazó con meterlos en cintura, van perdiendo.
El precio promedio del gas doméstico LP, que es el más utilizado en las viviendas de los mexicanos, bajó de 25.97 a 22.22 por kilo entre julio y agosto y esto pudo frenar un poco la inflación, que mantiene en vilo a las autoridades.