García Luna, Cárdenas Palomino y Reyes Arzate fueron tres elementos clave en la Policía Federal del Gobierno de Felipe Calderón. Los tres fueron piezas importantes en la lucha contra el crimen organizado que declaró el exmandatario. Y los tres ahora enfrentan a la justicia tanto de México, como de Estados Unidos.
Genaro García Luna, Luis Cardenas Palomino e Iván Reyes Arzate fueron tres de los principales elementos de la extinta Policía Federal que implementaron la estrategia de seguridad en el Gobierno de Felipe Calderón Hinojosa (2006-2012), quien al asumir el poder declaró una guerra abierta al crimen organizado, con el cual —según señalan las autoridades de Estados Unidos— se presume que estaban coludidos precisamente estos tres mandos.
Pese a la gravedad que implica que tres elementos de primer nivel de la Policía Federal estén presos y enfrenten a la justicia, tanto a la mexicana como a la estadounidense, el expresidente Calderón se ha deslindado de los señalamientos, en el caso de García Luna, y ha guardado silencio, en lo que respecta a los otros dos jefes policiales, una postura que contrasta con el activismo político con el cual se ha conducido en la presente administración de Andrés Manuel López Obrador.