Eran las 6:30 horas del pasado 8 de diciembre cuando alrededor de 180 comuneras del pueblo originario de San Miguel Topilejo llegaron al Zócalo capitalino para exigir a las autoridades federales que atiendan el problema de tala clandestina en los bosques de la comunidad.
Esta acción fue parte de los acuerdos de asamblea que días antes había tenido el sector agrario del pueblo, y fueron ellas, las mujeres comuneras, quienes levantaron la voz de la organización, quienes con indignación expresaron su preocupación por el bosque y la seguridad de las y los brigadistas que todos los días resguardan el territorio.