El CJNG tomó el poblado de la sierra de Coyuca de Catalán, quemó las casas, se apoderó de hectáreas de maguey y destruyó las fábricas. Vecinos refugiados en Vallecitos piden seguridad a la Gobernadora Evelyn Salgado y al Presidente López Obrador para regresar y ayuda para recuperar la producción y su trabajo.
La guerra por el maguey comenzó en Zihuaquio, municipio de Coyuca de Catalán, donde el Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG), tomó el pueblo, desplazó a la gente, quemó las casas y destruyó las fábricas de mezcal que era el sustento de las familias que salieron huyendo ante el temor a ser asesinados.
La caída del precio de la amapola ocasionó que los grupos del crimen organizado optaran por los recursos naturales de los pueblos; en Zihuaquio optaron por desplazar a los pobladores y ahora se quedaron con el maguey que sirvió por años para la producción del mejor mezcal de Guerrero.