En una declaración conjunta, los titulares de las cuatro diócesis católicas de Guerrero, señalaron que la estrategia contra la violencia debe incluir a grupos que la causan. Además, rechazaron la iniciativa de diputadas de Morena para despenalizar el aborto.
Los obispos de las cuatro diócesis de la Iglesia católica en Guerrero expresaron su preocupación por la violencia vinculada al crimen organizado en el estado y llamaron a las autoridades gubernamentales a “no despreciar la ayuda que los diferentes actores sociales pueden aportar para encontrar la pacificación de nuestros municipios y estados”.
En un pronunciamiento resultado de la reunión que sostuvieron del 11 al 13 de este mes en Tlapa, el arzobispo Leopoldo González González y los obipos de Chilpancingo-Chilapa, Salvador Rangel; de Ciudad Altamirano, Joel Ocampo Gorostieta; y el anfitrión, Dagoberto Sosa Arriaga expresaron su preocupación porque “en diversos puntos de nuestra provincia hay signos preocupantes de violencia”.