Los más de 20 pueblos nahuas de la Región Cholulteca se declararon en asamblea permanente y alerta máxima, ante la posible reactivación de la embotelladora que secó los pozos, ríos y ameyales. Afirman que están dispuestos a recuperar lo que les pertenece, como lo han hecho en toda su historia.
Es el espíritu del comunicado que ha difundido Pueblos Unidos de la Región Cholulteca y de los Volcanes, ante el atropello de los gobiernos federal, estatal y municipal, que entraron por la fuerza a la Casa de los Pueblos, donde las comunidades nahuas habían construido vida donde la empresa Bonafont robaba su agua.