Máquinas y tractores en la selva dentro de Quinta Roo están talando miles de árboles y aislando a animales en el tramo cinco del Tren Maya de Cancún a Tulum, una zona única en el mundo por sus cenotes y cuevas subterráneas, también tapadas sin permisos ambientales, advirtieron científicos apartidistas.
Sin permisos ambientales, la tala de árboles y cobertura de cuevas subterráneas en Quintana Roo se ha agudizado para abrir paso al Tren Maya en el tramo Cancún-Tulum, alertó la Unión Mexicana de Agrupaciones Espeleológicas (UMAE), dedicada a promover la conservación de las aguas subterráneas, consideradas patrimonio biocultural por ser una mezcla de biodiversidad, vestigios prehispánicos, selva y mar Caribe.
La asociación civil Moce Yax Cuxtal, con sede en Playa del Carmen, calculó —a partir de un estudio en Puerto Morelos— que se desmontarán alrededor de 8 millones de árboles de la selva quintanarroense.