Cerca de las 18:00 horas del 20 de junio de 2008, una serie de fallas y omisiones en un operativo policial, coordinado por el entonces Mando Único Policial (Unipol) en la discoteca New’s Divine, resultó en la muerte de 12 jóvenes, dos policías auxiliares y un policía judicial.
A 14 años de los hechos, no hay justicia pues las madres y padres de las víctimas siguen batallando para que la exoneración de Guillermo Zayas, quien diseñó y ejecutó el operativo, no se haga efectiva.