Con o sin ayuda de la DEA, la agencia antidrogas de Estados Unidos, Rafael Caro Quintero está de nuevo en prisión.
El desplome del helicóptero con saldo de catorce marinos muertos está plagado de misterio. El gobierno de Andrés Manuel López Obrador ha generado un vacío informativo que ocupa la especulación: en ese espacio de desinformación han tomado fuerza versiones aún no confirmadas oficialmente: que la aeronave fue derribada; que se quedó sin combustible; que sufrió una avería técnica; que viajaban agentes de la DEA…