Organizaciones, colectivos y mujeres feministas rechazaron la represión de la que fue víctima la saxofonista María Elena Ríos durante la primera jornada de la Guelaguetza 2022, donde protestó con una manta en la que se leía “Oaxaca feminicida” y fue sacada y golpeada por la policía estatal y la seguridad privada del gobernador de Oaxaca, Alejandro Murat.
Las organizaciones y mujeres indignadas demandaron una investigación y sanción inmediata al abuso de poder que se cometió el pasado 25 de julio contra María Elena Ríos, quien fue víctima de un ataque con ácido en septiembre de 2019, «toda vez que existen videos públicos que hacen evidente la identidad de los agresores y de sus superiores jerárquicos».