Siniestros como el del pozo carbonero en Sabinas, Coahuila, seguirán ocurriendo si no se reforma la Ley Minera salinista que desde 1992 beneficia a los empresarios, asegura el colectivo “Cambiémosla Ya”. Una iniciativa al respecto está congelada en el Senado y los diputados prometen presentar una próximamente.
Durante su visita al Senado a un foro sobre pueblos indígenas, José Pablo Antonio, un mixe afectado por la minería en Valles Centrales, Oaxaca, lamentó que los legisladores “no quieran abordar” una reforma a fondo de la Ley Minera, surgida en el salinismo y que durante tres décadas ha beneficiado a las empresas y pisoteado derechos humanos como recientemente se evidenció con los mineros atrapados en un pozo carbonero en Coahuila.