Las recientes muertes y detenciones de migrantes en Puebla y su repetición en otras partes de México y el mundo “siguen siendo resultado directo de las políticas migratorias que priorizan la militarización y la contención de flujos en tránsito irregular”, aseguraron el Instituto de Derechos Humanos Ignacio Ellacuría y el Servicio Jesuita a Migrantes México.
Las organizaciones expresaron sus condolencias con los familiares de los ocho migrantes que murieron y de los que resultaron heridos por la volcadura de una camioneta en la carretera federal en Cañada Morelos, Puebla, el pasado 12 de agosto, así como manifestaron su “profunda preocupación” por la detención de casi 700 migrantes, principalmente centroamericanos, en dos operativos en la entidad.