Hasta el 21 de agosto pasado se habían legitimado 5 mil 381 contratos colectivos de trabajo, de unos 550 mil que existen. Los 544 mil que faltan se han retrasado principalmente por la resistencia de empresarios, consideran expertos. El problema es que de cada 10 contratos colectivos de trabajo, nueve son de protección, en detrimento de los derechos de los trabajadores. La falta de presupuesto en la STPS sería uno de los factores que han posibilitado a las empresas seguir expoliando a la clase trabajadora.
Los contratos de protección en México son uno de los mayores obstáculos para organizar sindicatos y negociar convenios colectivos genuinos. Se pactan entre empleadores, gobiernos y sindicatos antidemocráticos con o sin el conocimiento de los trabajadores y, a menudo, están vigentes antes de que sean contratados. Con frecuencia, los trabajadores que han desafiado poderes corruptos que mantienen dichos contratos de protección enfrentan severas represalias, que incluyen despidos, amenazas, violencia y condiciones de trabajo deplorables.