FGE busca a tres narcomenudistas y adictos por la muerte del menor Kevin Yael, asesinado en una zona “blindada” de Tijuana ante la ineptitud de las autoridades. El adolescente les dijo a los homicidas que estaba asustado, pero no tuvo oportunidad. “Me arrebataron a un hijo; pido justicia”, reclama el padre.
El menor, quien cruzaba el puente que utilizan estudiantes para llegar al Centro Escolar Agua Caliente, caminaba distraído porque su concentración estaba en una video llamada que sostenía con un amigo. Se ponían de acuerdo para la hora de llegada de Kevin. Por eso no vio a sus verdugos.