El sistema de atención a la salud mental en México enfrenta un rezago histórico, desvinculación institucional y una insuficiencia de psiquiatras, además de que prevalece el estigma alrededor de la profesión y los pacientes.
“Hasta la fecha persiste el estigma en los médicos de los hospitales. Dicen: ‘Aquí no quiero un paciente que no sé cómo tratar, que no sé cómo controlar’. Eso es el estigma”, asegura Juan Manuel Quijada Gay-tán, director general de los Servicios de Atención Psiquiátrica (SAP) de la Secretaría de Salud.