“En México, lamentablemente, la situación de impunidad continúa”. Con esta frase, Julissa Mantilla Falcón, presidenta de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), abre la conversación en torno al caso Ayotzinapa y al fenómeno de la desaparición forzada en el país, que comenzó mucho antes de los hechos del 26 y 27 de septiembre de 2014.
A más de ocho años de la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, Mantilla asegura que la administración de Enrique Peña Nieto (2012-2018) “pudo haber actuado de manera más eficiente en su momento, pero no lo hizo”, mientras que la de Andrés Manuel López Obrador (2018-2024), si bien ha tenido avances, sigue enfrentándose a trabas para esclarecer el caso.