México se situó en el lugar 124 de 180 países evaluados -cayendo 2 posiciones respecto al 2021-, al tener, por tercer año consecutivo, 31 puntos sobre una base de 100 posibles, según el Índice de Percepción de la Corrupción (IPC) del 2022, que divulgó, el 31 de enero de 2023, la organización no gubernamental Transparencia Internacional (TI).
Según dicho índice -principal indicador mundial de medición de la corrupción en el sector público- el estancamiento de México se debe en gran medida a que “las grandes tramas de corrupción no han sido sancionadas; ni se ha devuelto a las arcas de la nación los recursos desviados”, en casos definidos como emblemáticos, como el de la “Estafa Maestra”, Odebrecht o Agronitrogenados.