La tarde del 20 de diciembre de 2017, el entonces gobernador de Chihuahua, Javier Corral, anunció la detención de Alejandro Gutiérrez Gutiérrez, exsecretario general adjunto del PRI y quien era señalado como un operador clave del esquema de desvío de recursos públicos hacia campañas electorales priistas ejecutado en esa y otras entidades: la Operación Safiro.
Corral, militante del PAN y quien tenía poco más de un año en el cargo —ocupó la gubernatura de Chihuahua entre octubre de 2016 y septiembre de 2021—, celebraba el arresto y lo describía como un paso necesario para llevar ante la justicia a quienes habían cometido actos de corrupción durante el mandato de su antecesor, el priista César Duarte.