Las desapariciones de personas en Guanajuato aumentaron en los últimos años. En este contexto, las familias acusan al Fiscal estatal de ignorar sus exigencias y no acelerar las búsquedas con vida. El caso de Mariana, Yoselin, Sandra, Paulina, Rosa y Gabriela, desaparecidas el mismo día en Celaya, mostró de nueva cuenta la ineficacia de las autoridades.
La desaparición de ocho mujeres en Celaya, Guanajuato, evidenció la crisis que vive la entidad en este tema y la falta de acciones de la Fiscalía estatal por atenderla, particularmente de Carlos Zamarripa Aguirre, su titular desde hace 14 años, acusan colectivos que reprochan el desinterés por cumplir los compromisos adquiridos con familiares para priorizar las búsquedas con vida. Sus cuestionamientos se suman a meses de señalamientos al Fiscal por la violencia que crece en el estado.