Organizaciones como Greenpeace, el Centro Mexicano de Derecho Ambiental y la Alianza Mexicana Contra el Fracking, alertaron de un inmenso derrame de hidrocarburos en el Golfo de México, que al 12 de julio tenía una extensión de más de 400 km², más del doble del área de la ciudad de Guadalajara.
De acuerdo a información recabada por el geógrafo Guillermo Tamburini, el derrame de crudo inició alrededor del 4 de julio en la misma zona donde se registró un incendio el 7 de julio en la plataforma de Petróleos Mexicanos (Pemex) Nohoch-A, en la Sonda de Campeche, que dejó un saldo de dos personas muertas, una desaparecida y ocho lesionados.