La población se encuentra en medio de una lucha por el control de la zona de los grupos criminales Los Tlacos y La Familia Michoacana.
La comunidad Nuevo Caracol en la sierra de Guerrero fue atacada de nuevo con bombas lanzadas desde drones y disparos de armas de fuego.
El Centro de Derechos de las Víctimas de Violencia “Minerva Bello” pidió por tercera ocasión a autoridades federales y estatales intervenir para proteger a la población.