La exjefa de Gobierno de la Ciudad de México concluyó sus giras de acercamiento a la gente como las empezó: con acarreos masivos, respaldo del presidente, del partido y de gobernadores, y entre denuncias por violación de la ley electoral.
Con toda la maquinaria electoral aceitada, de la que los acarreos fueron parte, Claudia Sheinbaum Pardo terminó sus giras por el país en busca de la candidatura presidencial de Morena para el 2024.
Fueron 10 semanas de acusaciones de irregularidades en el proceso interno, de estar bajo la sombra del presidente Andrés Manuel López Obrador y con las autoridades electorales pisándole los talones, así como de alardes sobre su paso por el gobierno de la Ciudad de México, lo cual, según pregonó, la puso “arriba en las encuestas desde hace un año”.